Habia una vez tres chicas que apostaban a la revolución naturista, y querían ir en contra del “no-se-puede-tomar-alcohol”. Muy bien vestidas y descalzadas salieron en busca de su liquido con el propocito de burlar al patovica, entre corridas, gritos, risas, pinchaduras de piés y un baul un tanto complicado, usaron las pantimedia de cobija para la multifruta, y las botellas de “sierras de los padres” como resipiente para el espiritual vodka… Una vez dividido el botin y escondido entre sus vestidos de gala entraron rumbo al salón, cuando entran la secuaz de marisa, osea MONTOVIO les dice que andaban con un riguroso control y que a casi nadie le habían dejado alcohol, pero las tres chanchitas no iban a ser tan boludas como gelpi, y ellas fondeaban debajo de la mesa entonándose, en la pista disimulaban bebiendo sprite con vodka y en el postre la salsa se aquo un poco para seguir con la mamúa. Pero la secuaz de marisa seguía expectante a los controles debajo de las mesas entonces no quedo mas remedio que sobreguardar nuestro botin en la mesa “marchand” a pesar de que se les explico que esa botella no era lo que parecía, la boluda de su madre se empino un profundo trago y experimento por ella misma que el agua ahora viene fortachona. Pero algo brillante sucedió, el ingenio se hizo presente y un gorro camuflo el pecado, dejando los descomponientes fondos de lado, pero ya era tarde la rubia burguesa ya estaba loca y comia el helado con pan, obedeciendo las ordenes de una drogadicta que se reía a carcajadas de sus actos malévolos… Todo parecía desfigurarse y tener un trágico y vomitivo final pero aparecion el champagne y las tres mosqueteras se rodearon de amigos para celebrar el bello momento…

Temperas, shorts, caída burguesa, espuma coronaron el final de lo que fue LA ODISEA de sus vidas y con antorchas encendidas todos a la fuente de eve “sociales adelante” porque ellos mandan y bueno nosotros los naturales “atrás”.

Colorin colorado no continua porque somo egresado´